''A veces las promesas no se pueden cumplir por un Estado raquítico''
Jose Pepe Mujica. Ex Presidente de Uruguay
Cuando proyectamos, o
planificamos, una reforma o refacción en nuestro hogar, lo hacemos en base a
los recursos con los que contamos (sean estos económicos, materiales
acopiados, la mano de obra de algún conocido para economizar, etc.)
La planificación en base a los
recursos disponibles, es esencial, pues nos permitirá afrontar, la totalidad de
la reforma a realizar, o dividirla y ejecutarla en pequeñas partes.
Esta introducción a modo de
ejemplo (de una situación que afrontamos,
necesariamente en algún momento de nuestras vidas) me permite plantear una
serie de conceptos, vinculados a la discusión política de fin de año en nuestro
Municipio; la Emergencia Económica, el Presupuesto proyectado para el 2016, y
las obras necesarias para mejorar la calidad de vida de los habitantes de
Puerto Iguazú.
En las plataformas de campaña,
varios candidatos, se comprometían a realizar las obras necesarias en los
barrios; en un análisis general, la gran mayoría coincidía, en ejecutar las obras
de infraestructura (agua, luz, empedrado, asfalto, desagües cloacales)
regularizar la problemática con la titularidad de las tierras fiscales, etc. En
general, los discursos se construían en base a problemáticas históricas, pero
los instrumentos y herramientas necesarias para solucionarlos, no fueron
explicados, así como los mecanismos para obtenerlos (créditos, recursos
propios, recursos externos, alianzas estratégicas, etc.) de qué manera, se iban
a planificar la ejecución de los programas ¿Qué proyectos eran los necesarios?
¿Cuáles son los prioritarios?
La planificación del presupuesto
del Municipio, debería presentarse, en tres presupuestos paralelos.
El primero, con lo que se refiere
a los recursos necesarios para afrontar sueldos de empleados y funcionarios, gastos
de insumos, gastos operativos, gastos de mantenimiento de equipos y
maquinarias, mantenimiento edilicio, etc.
El segundo, debiera incluir, los
recursos destinados a las obras que el gobierno deberá afrontar en corto,
mediano o largo plazo. El actual presupuesto, no es suficiente para ejecutar las obras prioritarias para satisfacer las demandas y necesidades de los habitantes, del segundo destino turístico del país. El municipio, no ejecuta obras con presupuesto propio. Para poder dar solución a las problemáticas anteriormente mencionadas; se debería evaluar la ampliación del presupuesto, la gestión de créditos mediante la Nación y la Provincia, ante bancos u organismos internacionales (BID-CAF, etc.).
De esta manera (y a modo muy general) se prevén los
recursos necesarios para ambos presupuestos. El presupuesto para el 2016, rondara
los 200 millones de pesos. ¿Es mucho?
¿Es poco?
El tercer presupuesto, debería garantizar la autonomía del Honorable Concejo Deliberante, se debería incorporar la figura de un Defensor del Pueblo y se debería prever la reglamentación de lo estipulado en la Carta Orgánica, el Tribunal de Cuentas y el Tribunal de Faltas.
El aumento de partida correspondiente a la coparticipacion y el aumento de la recaudación del Municipio (por el cobro de tasas) pueden ser las soluciones a corto plazo. El aumento de la recaudación del municipio, es una medida prioritaria, pensemos que el municipio brinda servicios, en algunas zonas, donde no esta resuelta la regularización de la tierra, esto imposibilita el cobro de la tasa por recolección de residuos, el cobro de la TGI; impide la regularización de comercios ubicados en dichas zonas, etc. Incorporar y optimizar recursos, esa es la premisa.
La gestión y administración de
los recursos públicos, es la definición de Política (por lo menos, la que me
gusta emplear generalmente).
Referencias.
BID. Banco Interamericano de
Desarrollo.
CAF. Banco de Desarrollo de América
Latina.